
SLEP Licancabur realizó charla a educadoras para fortalecer la inclusión de estudiantes con TEA en la primera infancia
El Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Licancabur llevó a cabo una importante jornada de capacitación dirigida a educadoras de párvulos y directoras de establecimientos de la región. El encuentro se centró en la implementación de la Circular 586, un documento clave para promover la inclusión y la protección de los derechos de los párvulos y estudiantes con Trastorno del Espectro Autista (TEA). La actividad se desarrolló en el marco de la Ley 20.545 (Ley TEA), buscando entregar herramientas y conocimientos prácticos para abordar las necesidades específicas de los alumnos en el aula.
Claudia Sánchez, directora de la Escuela de Párvulos, Inti Llacta y una de las asistentes a la capacitación, valoró la iniciativa del SLEP Licancabur. «Esta jornada que se generó hoy bajo la ley 20.545 de la ley TEA nos permitió conocer cómo abordar los protocolos, cómo trabajar con niños y niños con Trastorno del Espectro Autista, así que fue una instancia muy provechosa», afirmó Sánchez. La directora destacó que la instancia facilitada por el SLEP permitió a los jardines infantiles bajo su administración «conocer algunos tips y obviamente bajo el conocimiento de la ley para funcionar en los establecimientos».
La Circular 586 se erige como una guía fundamental para asegurar una educación de calidad e inclusiva desde los primeros años para niños con diversas necesidades educativas. En este contexto, Sánchez resaltó la pertinencia de esta normativa para la realidad regional: «Desde la primera infancia que es el nivel que nosotros trabajamos, nos permite garantizar una mejor educación para los niños con algún tipo de condición, ya que, si bien se menciona, en nuestra región tenemos un alto aumento de niños con necesidades educativas especiales, así que para poder abordarlos y trabajar de acuerdo con estas condiciones nos va a poder permitir con igualdad con los niños y niñas».
La labor de las educadoras de párvulos en la detección temprana y el apoyo inicial se presenta como crucial para la trayectoria educativa de los niños con TEA. Claudia Sánchez explicó que en la primera infancia los establecimientos reciben «bastantes niños donde podemos entregar las primeras herramientas para la educación inicial para que en la educación básica o en la transición con las escuelas de párvulos puedan adaptarse o puedan desarrollarse con mayor autonomía dentro de sus capacidades».
Esta capacitación organizada por el SLEP Licancabur se suma a los esfuerzos por fortalecer las prácticas inclusivas en la comunidad educativa de Calama y sus alrededores. La correcta comprensión y aplicación de la Circular 586 por parte de las educadoras y directoras se perfila como un paso esencial para garantizar los derechos y el desarrollo integral de los estudiantes con TEA desde sus primeros pasos en el sistema educativo.






